La obesidad no es simplemente el resultado de comer en exceso, también existen factores asociados que la producen.
La obesidad es considerada la enfermedad metabólica más frecuente en el mundo occidental y de países en vías de desarrollo, pudiendo ocasionar costes socio económicos estimados de entre el 2 y el 7% de las partidas de sanidad por sí misma y por las enfermedades relacionadas con ella.
Por ello, debemos tener en cuenta los riesgos de la obesidad; sus efectos más negativos se producen cuando pueden agravar patologías como la diabetes, la hipertensión, complicaciones cardiovasculares, hasta incluso a desarrollar ciertos tipos de cáncer.
Existen diversos factores de riesgo para el desarrollo de sobrepeso y obesidad, a continuación le mencionamos más frecuentes:
》Hábitos No saludables
La falta de actividad física, los patrones de alimentación poco saludables, una cantidad insuficiente de sueño y los niveles altos de estrés pueden aumentar el riesgo de tener sobrepeso y obesidad.
》Edad
La obesidad infantil sigue siendo un problema grave y algunas poblaciones corren más riesgo de padecerla que otras. El riesgo de padecer un aumento de peso no saludable se incrementa con la edad. Los adultos que tienen un IMC saludable a menudo comienzan a subir de peso en la adultez temprana y lo siguen haciendo hasta los 60 a 65 años, cuando en general empiezan a bajar de peso.
》Entornos poco saludables
Muchos factores del entorno pueden aumentar el riesgo de tener obesidad:
Como los factores sociales, por ejemplo tener un nivel socioeconómico bajo o vivir en un vecindario con un entorno social poco saludable o poco seguro;
factores propios del entorno, tales como la posibilidad de acceder fácilmente a comidas rápidas no saludables, un acceso limitado a establecimientos recreativos o parques y la ausencia de espacios seguros o accesibles para caminar en el vecindario;
exposición a unas sustancias químicas llamadas obesógenos que pueden alterar las hormonas y aumentar el tejido graso del organismo.
》Embarazo
Durante el embarazo, las mujeres forzosamente aumentan de peso, para algunas mujeres hasta después del nacimiento del bebé, les es difícil bajar ese peso que aumentaron. Ese aumento de peso puede contribuir a la manifestación de la obesidad en las mujeres.
》Falta de sueño
No dormir lo suficiente o hacerlo en demasía puede provocar cambios hormonales que aumentan el apetito. También es posible que sientas ganas de comer alimentos con alto contenido de calorías e hidratos de carbono, que pueden contribuir al aumento de peso.
Sin embargo aún cuando tengas uno o más de estos factores de riesgo, no significa que estés destinado a ser obeso, puedes contrarrestar la mayoría de los factores mediante una dieta, actividad física y ejercicio, así como a través de cambios de comportamiento en tu vida diaria.